Cheryl Miller el espejo donde mirarse de Reggie Miller

Reggie Miller fue uno de los grandes depredadores que tuvo la NBA en la década de los 90’s. Su rol de jugador decisivo le llevó a recibir el sobrenombre de Miller «The killer» (el asesino) debido a su capacidad letal y su sangre fría para anotar en los momentos más importantes.

Se enfrentó con muchos de los grandes jugadores de su época e incluso fue uno de los rivales más valorados de un jugador como Michael Jordan, que le consideró como uno de sus mejores defensores, aunque realmente Reggie Miller siempre fue superado por His Airness.

Dentro de sus armas ofensivas, destacó como uno de los mejores y más prolíficos lanzadores de triples de la historia de la NBA, siendo en su retirada el jugador que más triples había anotado de todos los tiempos, hasta que fue superado por Ray Allen. También desde la línea de tiro libre demostró su sangre fría en momentos esenciales para los Indiana Pacers.

Sin embargo antes de todos sus rivales de la NBA, Reggie Miller tuvo una curiosa rivalidad con una de las personas que le hizo crecer y mejorar cada día en su baloncesto. Le llevó a ser quien realmente llegó a ser en el mundo del baloncesto.

Esa persona fue su hermana, Cheryl Miller, una de las mejores jugadoras de la historia del baloncesto.

Ambos hermanos se llevaban menos de dos años de diferencia de edad y mantuvieron una firme rivalidad en su juventud a mediados de los 80’s.

Cheryl, la hermana mayor, fue una de las mejores jugadoras de la historia del High School y de la NCAA, llegando incluso a anotar en un partido con su Instituto Riverside Poly, la espectacular cifra de 105 puntos.

Más tarde, en la Universidad de Southern California (USC), ganó dos títulos consecutivos de la NCAA en 1983 y en 1984 siendo nombrada en ambos campeonatos la MVP del torneo. La mayor de los Miller alcanzó una gran fama en el baloncesto universitario norteamericano, mucho mayor de la que alcanzó Reggie en su paso por UCLA.

Todo lo que lograba el pequeño Reggie había sido continuamente superado por su hermana Cheryl y según han declarado ellos mismos, Cheryl siempre le ganó los 1 contra 1 a Reggie. De hecho, cuando Reggie creció lo suficiente para taponar los tiros de su hermana y ganarla, Cheryl automáticamente cambió los retos de 1 contra 1, al famoso juego del HORSE.

Reggie Miller ha afirmado en varias ocasiones que el arte del trash talking que explotó con éxito habitualmente en la NBA contra sus rivales, lo aprendió en los partidos que jugaba contra su hermana que siempre le llevó al límite de lo psicológico (deportivamente hablando).

Cheryl se retiró tras su paso por la Universidad de Southern California, siendo sus mayores éxitos deportivos con el Team USA.

En aquel momento todavía no existía una liga como la WNBA, donde seguramente hubiera sido un terreno propicio para que Cheryl demostrara su talento en el juego.

Reggie creció bajo la alargada sombra de su hermana, una jugadora que siempre demostró ser una auténtica fuera de serie para el baloncesto y que le hizo trabajar sin descanso día a día para mejorar e intentar superarla. Incluso en muchas ocasiones, la comparación con su hermana fue utilizada por sus rivales como forma de trash talking contra el propio Reggie.

Seguramente sin Cheryl, Reggie Miller nunca habría llegado a ser el gran jugador que la fuerza de superación personal y su instinto competitivo le llevó a ser.

Ambos hermanos son miembros del Hall of Fame, los primeros hermanos hombre y mujer en conseguirlo.